El encierro que generó el Covid fue –y sigue siendo– muy duro para cualquier arte. Pero hay alguien que resistió ese período como pocos artistas en el planeta: el alemán John Neumeier, estrella de Hamburgo, uno de los coreógrafos más importantes del medio. Una leyenda en actividad.
A sus 82 años, en lugar de frenar, el artista decidió aprovechar el encierro para generar una serie de proyectos junto al Ballet de Hamburgo, dirigido desde hace décadas por él. El primero de ellos fue una pieza conmovedora que daba cuenta de la impuesta distancia social que regía nuestro día a día. El nombre de la obra fue Ghost Light (“Luz fantasma”).
Fue una filmación de tres días, en los que Neumeier nunca llevó a cabo la obra completa. Las cámaras registraban momentos puntuales, fragmentos, y el resto lo llevaría a cabo la magia de la edición. Neumeier declaró: “Queríamos capturar la inmediatez de cada momento, cada segundo de verdad que hubiera en la performance”.
La versión del clásico de El Bardo que podrá verse en nuestra pantalla es una experiencia única, que aprovecha el encierro y la capacidad del cine para iluminar la maravilla de la mirada de John Neumeier.
🎬 Sueño de una noche de verano. Domingo 12 a las 🇦🇷 🇲🇽 17.30 h 🇨🇱 16.30 h